A continuación, os dejo un nuevo adelanto de Wicked que Vilma's Book Blog ha compartido hoy con nosotros.
Como no es un capítulo entero, os lo traigo traducido, para vuestro disfrute!!!
Él bajó la barbilla, y mi corazón saltó “¿Vas a soltar mi camiseta? Quiero decir, no tienes por qué hacerlo, pero como sigas agarrando mi camiseta así, voy a empezar a tener todo tipo de ideas sucias que, no te quepa duda, llevaré a cabo”
Al principio no lo entendí. ¿De qué demonios estaba hablando? Algunas partes de mi cuerpo se quedaron enganchadas al tema de las ideas sucias que él llevaría a cabo y estaban muy felices por ello. Bajé la mirada y vi mis manos agarrando en sendos puños su camiseta, y… sus brazos ya no estaban a mi alrededor.
Oh, Dios mío, le estaba metiendo mano – a su camiseta. ¿Podías meterle mano a una camiseta? Estaba bastante segura de estar haciéndolo con su camiseta.
Soltando mis manos, di un paso hacia atrás y reboté contra la pared de ladrillo. Un movimiento super sigiloso. Quería pegarme a mí misma.
Los ojos de Ren brillaron bajo la luz difuminada que se filtraba entre los edificios. No dijo nada durante un instante, simplemente sosteniéndome la mirada con la suya y después “Probablemente deberíamos salir de aquí”
Buena idea. Una idea genial. Los testigos podrían haber dado nuestra descripción y aquellos que estaban en nuestro equipo es probable que no estuvieran cerca para poder intervenir. Tomando una inspiración profunda, tomé las riendas de mis recién descubiertas partes de mujer activas mientras él se hacía a un lado con gracia. Para ser un tipo tan grande, se movía como si estuviera hecho de aire. El modo en que se movía en general era algo fascinante de ver.
O yo, realmente, en serio, sólo necesitaba echar un polvo.
Suspiré.
Entonces, la peor cosa posible en la historia de la humanidad y más allá salió de mi boca “¿Tienes novia?”
Maldita mierda, no acababa de preguntar eso. Ren me miró por encima del hombro, enarcando una ceja. Lo había preguntado. Aquellas palabras realmente salieron de mi boca y quería mutilarme a mí misma, pero esperé escuchar su respuesta.
La sonrisa de Ren fue como el chocolate negro, suave y rica “Todavía no”
Saludos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario